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junio 18, 2009

Temen indígenas actos de contrainsurgencia ante su oposición a la autopista en Mitzitón

Los gobiernos federal y estatal tendrían el apoyo de dos grupos ligados a evangélicos y polleros
La propiedad del jefe de una banda de indocumentados sería el “nudo del conflicto”, señalan
Hermann Bellinghausen. La Jornada

Mitzitón, Chis., 17 de junio.
La oposición de ejidatarios a que pase por sus tierras la programada autopista San Cristóbal de las Casas-Palenque corre el riesgo de ser “combatida” mediante procedimientos “irregulares” o de contrainsurgencia, por lo demás muy extendidos en Chiapas, donde dividir comunidades se ha vuelto política de Estado.
En el caso de Mitzitón, los gobiernos estatal y federal parecen contar con las “acciones” de dos grupos, muy vinculados entre sí, a decir de los representantes ejidales: uno lo forman seguidores de la iglesia cristiana Alas de Águila, organizada como grupo militar, que suma a su evangelización los ejercicios marciales. “Lo que no hemos visto es que lleven armas”, aclara la autoridad del ejido, de mayoría católica. Esa iglesia constituye “el Ejército de Dios”, y lo encabeza Esdrás Alonso, un pastor con ocasional presencia mediática.
El otro grupo es dirigido por Carmelo Díaz López, promotor de Alas de Águila y “jefe” de una banda de indocumentados que opera en municipios vecinos; es ejidatario de Mitzitón, aunque radica en Nuevo Jardín (Teopisca). Su propiedad dentro del ejido está “cantado” que sería el nudo de un evental conflicto. Él ya manifestó su respaldo al paso de la autopista. Al asociarse con el gobierno introduce en la comunidad tzotzil una útil cabeza de playa.
Los representantes ejidales hacen acusaciones graves en su contra. “Además, tenemos muchas amenazas suyas”, señalan, y describen la actividad de los polleros. Tienen una banda “bien organizada” y, al parecer, protegida por las autoridades. Se les expulsó por tales actividades, pero algunos conservan tierras en Mitzitón. Cuentan con una “casa de seguridad” en Teopisca y unos 45 vehículos “de todo tipo”.
En septiembre de 2001, la comunidad capturó a un pollero del grupo y lo entregó a la Procuraduría General de la República, “con todo y carga”: siete indocumentados guatemaltecos y 22 salvadoreños. Cuatro días después, el traficante estaba libre. Alardeaba haber pagado 120 mil pesos al Ministerio Público para salir.
“Hemos mandado notas al gobierno, pero no hace caso. Desde Pablo Salazar Mendiguchía se sabe de estos delincuentes. Y ahora, con Juan Sabines. Se dice que el gobierno de Felipe Calderón persigue la delincuencia, pero aquí vemos que no es cierto”, explica el representante ejidal.
Otro personaje de esta maniobra de división es el delegado transexenal de la Procuradurá Agraria, Rufino Rosales, quien desde el foxismo ha intentado meter el Procede en Mitzitón y romper la comunalidad. En junio de 2008 avaló una presunta acta de asamblea favorable a la autopista, con numerosas firmas falsificadas, además de ocho difuntos y dos presos.
“Quieren hacer pasar por religiosos los problemas de Mitzitón, pero no lo son”, añade el vocero, sin negar que parte de los ejidatarios no profesan la religión católica, pero se mantienen vinculados a las acciones comunitarias. “Pensamos como la Constitución, cuando dice que todos somos libres en nuestras creencias”.
Alas de Águila y su Ejército de Dios (muy extendido en los Altos de Chiapas) llegó aquí en 2001. El argumento de esa iglesia castrense es la autodefensa contra la intolerancia de los católicos, un añejo problema de los indígenas chiapanecos.
El predio del mencionado Carmelo Díaz, a mitad del ejido, es el único con cerca de púas en un territorio donde las parcelas son separadas con lajas, palos, o nada. Sólo allí se ve laborando no a una familia o labriegos aislados, sino a un grupo de más de 10 hombres que observan detenidamente el paso de los periodistas.
Ante estas circunstancias, es elocuente la advertencia plantada al pie de la carretera, no lejos del manantial que da vida a la comunidad: “Ejido Flores Magón y Mitzitón no permitiremos la construcción de la autopista dentro de nuestro territorio. Por acuerdo de los ejidatarios, el que intente se pone a disposición del pueblo”. Y subraya: “Sea quien sea”.